“Ustedes ya me conocen. No vengo a traerles trucos de magia, planes faraónicos, ni palabras grandilocuentes. Soy un hombre sencillo, que ama su trabajo y a su país. Nada más”, fueron las primeras expresiones que sumergieron a Medina en sus conclusiones, tras casi dos horas de exposición.
A seguidas, construye con la expresión “la verdad”, un sentimiento de cuestionamiento entre los que le escuchan, quelo lleven a verificar si sus planteamientos resultan promesas incumplidas o por el contrario, se pueden palpar en distintos puntos del país.
“La verdad de un país que lucha a diario y que, con esfuerzo, está obteniendo grandes victorias, cosas que hace poco parecían imposibles”.
“La verdad de una gente que progresa, que se esfuerza y que también a veces se desespera, con justa razón. Pero que siempre sigue adelante”.
“La verdad de una gran familia que, como todas las familias, tiene días buenos y malos, comparte discusiones y alegrías pero sobre todo, y por encima de todo, permanece unida por la fuerza del amor”.
Reeleccionista. Para el diputado Alfredo Pacheco, del opositor Partido Revolucionario Moderno (PRM), se trató de un discurso de campaña en este año preelectoral, con expresiones indirectas que iban dirigidas a un sector del gobernante Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Pacheco citó que la disposición del gobernante, en el sentido de disponer un aumento del sueldo mínimo a 10,000 pesos en el sector público, evidencia la existencia de un problema de desigualdad y pobreza que vive el país.
Esta posición también es compartida por Ernesto Selman, del Centro Regional de Estrategas Económicas Sostenibles, quien aseguró que se trató de un discurso reeleccionista con promesas a diferentes sectores como jóvenes, mujeres otros, además de las expresiones de que continuará trabajando, según el diario digital Hoy.
