Después de bañarse en la playa o en piscinas comunes, algunas mujeres pueden experimentar vaginitis, y hay varias razones para esto.
Infecciones por hongos:
Provocadas por el crecimiento excesivo de hongos, especialmente Candida, en ambientes húmedos y cálidos como los de la playa y las piscinas.
Infecciones bacterianas:
Ocasionadas por bacterias presentes en el agua de las piscinas y playas, que pueden irritar la vagina y causar vaginitis.
Desequilibrios en la microbiota vaginal:
Alteraciones en la composición normal de bacterias, hongos y otros microorganismos que colonizan la vagina, aumentando la susceptibilidad a las infecciones.
Cuando esta microbiota se desequilibra, aumenta el riesgo de desarrollar infecciones vaginales.
Trauma físico:
Lesiones o abrasiones en la piel genital debido al contacto con la arena u objetos en la playa, incrementando así el riesgo de infección.
Permanencia con trajes de baño húmedos:
Mantenerse con trajes de baño mojados durante períodos prolongados, creando un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias y hongos en la zona genital.
Es fundamental practicar una buena higiene íntima y tomar medidas preventivas para reducir el riesgo de desarrollar vaginitis después de la exposición al agua de la playa o las piscinas comunes.
Aquí hay algunas recomendaciones:
Cambiarse de traje de baño mojado: Después de salir del agua, cámbiate de inmediato a ropa seca para evitar permanecer con un traje de baño húmedo durante mucho tiempo.
Practicar una buena higiene íntima:
Lávate cuidadosamente la zona genital con agua y jabón suave después de bañarte para eliminar cualquier bacteria o residuo de cloro.
Evitar duchas vaginales:
Las duchas vaginales pueden alterar el equilibrio natural de la microbiota vaginal, aumentando el riesgo de infecciones.
Usar ropa interior de algodón:
Opta por ropa interior de algodón transpirable, que permite una adecuada circulación de aire y ayuda a mantener la zona genital seca.
Limitar el uso de productos perfumados:
Evita el uso de productos perfumados o con ingredientes irritantes en la zona genital, ya que pueden causar irritación y aumentar el riesgo de infecciones.
Si experimentas síntomas de vaginitis después de bañarte en la playa o en piscinas comunes, es importante que consultes a un médico para recibir un diagnóstico adecuado y un tratamiento apropiado.
Dr. Yotin Ramón Pérez
