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¿Què otra cosa diferente a lo ocurrido el domingo se debìa esperar?

Por Carlos Rodrìguez 
Santo Domingo.-El calendario marca que hoy es 20 de febrero, día número 51 de 2024. Veo que los medios de comunicación traen como titular de noticia que el Comité Político (CP) del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) realizó su primera reunión de este año. 

Para mi, la noticia, mi titular, no es que el otrora omnipresente CP del PLD cobró vida a los 51 días del año y finalmente se reunió..., ¡por primera vez, pese a que estaba en marcha un proceso electoral donde se debatía el control del poder municipal!. 
Para ser honesto, no creo que la situación sea verdaderamente diferente en el otro lado, la Fuerza del Pueblo (FP) que es el otro ángulo opositor en el marco del trípode que sustenta al sistema dominicano de partidos.

Pero..., bien! 
Lo que quiero es resaltar la gran diferencia con respecto a los tiempos de Juan Bosch, cuando a estas alturas, transcurridos 51 días de un año electoral y en medio de una contienda tan trascendental de la lucha por el poder, ya habrían sido al menos siete las reuniones ordinarias realizadas por su máximo órgano de dirección política (lo hacía normalmente cada lunes) para planificar, comunicar y orientar tanto la operativización como la ejecución las tareas políticas de un partido donde no nadie "irrumpía" sino que militaba. 
Y repito: lo más grave es que, si no me equivoco, algo parecido o lo mismo podría estar ocurriendo en la Fuerza del Pueblo. Son señales significativas, que necesariamente desembocan en resultados como el ocurrido el pasado domingo en la jornada electoral municipal. 

Entonces, siendo ésa la realidad, ¿cómo lograr que esos dos partidos le hagan verdadera oposición al gobierno, si su conducción parece ser unipersonal?. ¿Cómo conectarían su discurso y sus acciones con el pueblo, para hacerse percibir empáticos con una población general que, contrariamente, ahora los ve muy lejanos? ¿Cómo puede la gente convertir su simpatía en voto y acudir a ejercerlo para expresar a través del sufragio su repudio a un gobierno que la golpea?. ¿O es que sin tener vínculo, sin verse representada por ninguna de las dos formaciones políticas, acaso la gente tendría motivo para salir a beneficiar con su voto y fidelizar su adhesión a ambas organizaciones "opositoras"?