Según un comunicado de la PGR, en total fueron quemados 315.612 kilogramos de distintas drogas y 629 de otro tipo de sustancias que los análisis determinaron que no correspondían a estupefacientes, todas ellas decomisadas en más de 1,100 casos.
Dentro de la droga incinerada, había 164.622 kilogramos de cocaína (un 52.16 % del total), 148.945 de marihuana (47.19 %, y 2.018 kilogramos de crack (un 0.63 %).
Además, 14 gramos correspondían a éxtasis, equivalentes al 0.0043%, y 13 gramos a hachís, un 0.0041%.
La mayor cantidad de los narcóticos quemados fueron ocupados en la provincia La Vega y en Santiago, aunque también hubo decomisos en Dajabón, Distrito Nacional, Duarte, La Altagracia, San Cristóbal, María Trinidad Sánchez, Barahona, La Romana, San Pedro de Macorís, Azua, Peravia, Puerto Plata, Espaillat, San Juan y Samaná, entre otras.
La PGR indicó que en los ocho meses de este año han sido incinerados en total 17,630.578 kilogramos de diferentes sustancias narcóticas.