Por medio de su cuenta de Twitter el funcionario también indicó que, concluida las indagatorias de lugar, se van a tomar las medidas de lugar.
Al referirse al tema, Hernández calificó como un exceso que el material didáctico terminara en la basura y que esa disposición fue hecha de manera incorrecta.
Asimismo, el ministro afirmó que “los libros nunca envejecen y siempre son fuentes de conocimientos”.
Al hacer la denuncia, el ciudadano que difundió el material audiovisual deploró que los textos sean tirados a la basura y, según mostró, el material fue desechado desde el centro educativo Antera Mota, ubicado en la referida provincia.
«Miren como están los libros nuevos, todo eso lo mandan a botar. Eso da pena», dijo mientras los encargados de recoger los desechos sólidos depositan los libros en el camión de la basura.