El supuesto asesino responde al nombre de Domingo Ogando, y la occisa a Ivelise Ogando. Ambos tenían dos hijos de 15 y 13 años.
Según fuentes, Domingo esperó a que sus hijos salieran de la casa para la escuela y así cometer el asesinato en su vivienda.
Igualmente alegan que la mujer pidió ayuda a su padre mientras era apuñalada, exclamando “Me están matando” pero este no pudo hacer nada debido a su enfermedad y debilitamiento producto de la edad.
Asimismo el matador se atrincheró en su casa, esperó que los agentes policiales llegaran y procedió a entregarse.
El cuerpo sin vida aún permanece dentro de la vivienda.
Fuente: elcaribe.com