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De músico a fabricante de tamboras

En las entrañas de uno de los barrios mas populosos de la capital dominicana, cuna de artistas, deportistas, profesionales, y de una amalgama de gente con talento para deleitarnos, vive y hace del arte un oficio Carlos Pérez, quien es fabricante de tamboras y congas.

En un tiempo fue músico, pero creyó que no tendría futuro y prefirió aprender a fabricar los instrumentos de percusión que tanto le gustaban. .
                           Carlos Pérez y Carlos Mejia

Comienza por la década de los 70 con su taller en el emblemático "Ensanche Pipí", uno de los callejones más famosos del barrio de San Carlos, Ubicado en la calle Abréu # 53 del Distrito Nacional.

Su trabajo ha estado en manos de los más grandes percusionistas del país, tal es el caso del artista Johnny Chocolate Percusión, que dicho por el artesano "tiene sus exigencias a la hora de seleccionar sus tamboras" Carlos, es un referente a la hora de hablar de un buen artesano del tambor, según cuenta Edgar Molina.
En el 2004 deja la música, y comienza la fabricación de tamboras, “a mi casa llegan toda clase de músicos, Rubbby Perez, La Patrulla 15, Milly y Los Vecinos, la New York Band, Cuco Valoy entre otras agrupaciones”. Llego a tocar con los “Veteranos del Ritmo” orquesta patrocinada por la marca de cigarrillo “Premier”.
A juicio de este "hay que nacer con esto, todo el que nace, nace con un don, y yo siento eso en mi", expreso.

Estos son instrumentos de percusión, llego a a tocar con Yoyito Cabrera, Rafael Mancebo, y todavía a sus 67 años, se mantiene dándole forma a los instrumentos, ya que desde pequeño, nos dice que esa vena artística le atraía todo lo que tenia cuero.

Nos cuenta que “para los 70 ya yo fabricaba conga, a mi mama no le gustaba que yo fuera músico, que fuera mecánico, pero desde los 9 años ya yo tocaba”.

Entrar a este lugar uno se transporta, y da gusto ver como este veterano, y artesano le da forma a lo que mas ama.

Por Carlos Mejia