Se cumplieron ayer 48 años de la caída en combate en la autopista Las Américas de los principales dirigentes del grupo de Los Palmeros, liderados por Amaury Germán, cuyas muertes, sumadas a las de Caamaño y sus guerrilleros de playa Caracoles un año después, sepultaron en el país el método de la vía armada para alcanzar el poder.
Este aniversario de Los Palmeros pasó casi inadvertido, lo que ha llamado poderosamente la atención por tratarse de un año electoral en el que las propuestas de la “izquierda revolucionaria” están ausentes, como si su sacrificio fuera en vano.
Incluso, muchos que se autoproclaman de izquierdas dan tumbos y asumen todo tipo de consignas, sin diferenciarse de la ideología del aliado de ocasión.
Por Nelson Rodríguez
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