Producto de la inactividad, los costosos invernaderos se deterioran en forma progresiva.
Experimental Arroyo Loro, cuyos especialistas en leguminosa han liberado 11 variedades con excelentes resultados, languidece, es un elefante blanco, un fantasma que se cae a pedazos, abandonada a su suerte, por la carencia de recursos económicos desde el 2004.
Fundada en el 1978 durante por el entonces secretario de Agricultura, Hipólito Mejía Domínguez, cuenta con 11 técnicos, quienes inclusive, usan parte de sus salarios para realizar determinadas actividades relacionadas con investigaciones.
Durante el Gobierno 2000-2004, esos centros de investigación, no solo de agricultura sino también de pecuaria y de otros rubros diferentes a leguminosa, desarrollaron y dejaron un gran catalogo para el futuro, pero tienen 12 años engavetados.
Desde el 1978 hasta el 2004, dicha estación, perteneciente al Instituto Dominicano de Investigaciones Agrícolas y Forestales-IDIAF-, ha liberado las variedades PC-50, JB-178, Cias 95, Saladín 97, Blanca San Juan, Anacaona, Arroyo Loro Negro, DPC40, Idiaf Yaconin, Buena Vista y Primavera, con excelentes resultados en lo relativo a la resistencia a plagas y enfermedades.
Aun encontrándonos en la era de la investigación, de cuyos resultados encontrados el mundo de hoy esta siendo transformado, el Instituto Dominicano de Investigaciones Agrícolas y Forestal-IDIAF-, y el Consejo Nacional de Investigaciones Agrícolas y Forestales-CONIAF-, parece olvidado la existencia de la Estación Experimental de Arroyo Loro.
Fausto Medina, director, Julio Nin, Juan Cedano, Fernando Oviedo, Martín Frías, Víctor Langa, Ana Mateo, Leonis Arias, Graciela Godoy de Lutz, Jhonny Segura y Manuel Encarnación, son especies de héroes anónimos, haciendo de tripa corazón para al menos hacer algo en beneficio de la investigación para que los productores de leguminosa, principalmente habichuelas y guandul, con nuevas variedades aumenten la producción y productividad.
Todas esas simientes liberadas, han dado excelentes resultados porque, según los técnicos y productores, son más resistentes a plagas y enfermedades que las variedades que se utilizaban en épocas pasadas.
El ingeniero Julio Nin, se quejo porque, según afirmó, desde hace mas de dos años tiene en carpeta lo que llama línea avanzada de nuevas variedades de habichuelas que identifica como Chalona Negra (RD-209149-AX), Maravilla Roja (RD 201643-16), Nueva 512 (Roja) y Perla Negra (RD-209202-2), está cansado de solicitar los recursos económicos para montar la investigación, pero no le han hecho caso.
No solamente es la estación Arroyo Loro que solo faltaría cerrarla por la falta de recursos para nuevas continuar liberando nuevas variedades de leguminosa, en la misma situación están las de Bahoruco, Palo Alto, en Barahona, Azua, San José de Ocoa, Bani y La Vega.
Y que conste, todos los representantes de las principales asociaciones de pequeños y medianos agricultores, José Luis González, Robin Alcántara, Milciades Espinosa, Manuel Matos Pérez y Pablo de la Rosa; así como los empresarios privados Alejandro Ramírez, Mario Ramírez, y Félix Florentino, entre otros, también reclaman la inyección de recursos económicos para continuar investigando nuevas variedades de habichuelas.Por Manuel E. Rosario. 29/10/2016.
