bohechiodigital@gmail.com,..18/2/2014---En vista de que el flujo de mercancías desde República Dominicana a la nación de Haití está asociado a las incertidumbres propias del transporte terrestre de carga, en términos de inseguridad, sobrecostos y hasta embotellamientos y obstrucciones en la frontera para cumplir con los procesos aduaneros que establecen ambos países, existe la necesidad de mejorarlo a través del incremento de los servicios en el transporte marítimo de corta distancia (short sea shipping).
Así lo consideró el empresario naviero licenciado Aníbal Piña, quien recomendó a su vez diseñar una estrategia en la que convengan ambas naciones de forma tal que se pueda incentivar esta modalidad de transporte que ha sido exitosa en Europa y otras naciones del mundo al punto ser denominadas “las autopistas del mar”.
“Según estimaciones realizadas hasta el 2013 las exportaciones en el mercado formal al vecino país ascienden a unos mil cincuenta millones de dólares (US$ 1,050,000.00) convirtiéndolo en el segundo cliente comercial más importante del país, y ahora que el sector exportador tendrá mejor acceso a financiación para impulsar su crecimiento con el anunciado Banco Nacional de Desarrollo de las Exportaciones, sería aconsejable combinar estos esfuerzos con una buena respuesta logística que en la mayor parte de los casos representa el 45% de los costos para poder producir y colocar los productos en los mercados internacionales”, apuntó Piña.
El presidente de AP Marine Cargo (Transporte Marítimo Inteligente) expresó que lo mismo está intentando hacer Centroamérica, México y Colombia con la región Mesoamérica en la que la República Dominicana ha estado participando, aunque con pocas posibilidades, a raíz de lo cual recomendó hacer su propio esquema con Haití y las islas menores y de esa manera convertirse en el Centro de Abastecimiento de la zona con un transporte marítimo eficiente y con mucho mayor nivel de competitividad. “De hecho, esto ha sido un reclamo de los sectores productivos nacionales”, señaló.
El experto portuario especificó asimismo, que su planteamiento no implica la creación de una flota mercante estatal, sino más bien concentrar la carga en una especie de clúster para que se convierta en volumen suficiente con capacidad de atraer a los armadores propietarios de las naves y se implemente un servicio especial para abastecer a Haití e islas menores.
A propósito de que muchos sectores han demandado una flota mercante nacional, el licenciado Piña manifestó al respecto que los costos de capital vinculados a la adquisición de las naves, el precio del dinero en el mercado internacional y el precio de los combustibles, serían factores que atentarían contra la factibilidad de dicha escuadra, amén de los inconvenientes que crea no disponer de un marco normativo moderno para el registro y abanderamiento de las naves.
Finalmente, el empresario naviero sugirió incluir este tema en el dialogo que se está llevando a cabo con Haití de forma que se puedan actualizar las leyes y normativas de ambos países que permitan un flujo más competitivo de la mercancía entre ambas naciones.
