bohechiodigital@gmail.com, viernes 31 de Enero 2014-El Granero del Sur, tal como lo conocemos, tiene los días contados. Y de no iniciar un proceso intenso y rápido de reconversión productiva, una expansiva ola de pobreza acrecentada arropará a decenas de miles de pequeños productores.
También perjudicará a los consumidores que por todo el territorio nacional dependen de los bondadosos frutos de las tierras de San Juan.
El Valle de San Juan, bajo las manos laboriosas de 30 mil productores que con sus espaldas al sol cada día labran sus tierras, produce el 51% de las habichuelas negras, el 5% del arroz, el 26% del maíz, el 27% de los guandules, y el 17% de la cebolla.
Pero el reloj corre, y se cumplen los plazos para que entren en vigencia los desmontes arancelarios en el marco de los tratados comerciales firmarlos por República Dominicana con Estados Unidos y Centroamérica, y los rubricados en el ámbito de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
En un informe titulado "Desarrollo Productivo y Competitividad de la Provincia de San Juan", el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Afirma: "El futuro económico de estos productores se agrava, debido al anuncio reciente de la reducción paulatina de los apoyos al arroz y el final del período de desgravación de los bienes sensibles incluidos en la Rectificación Técnica de la Organización Mundial del Comercio en virtud del DR-CAFTA".
A lo largo de su historia, los productores sanjuaneros han labrado la tierra bajo condiciones tan precarias, que les resulta imposible sobrevivir en un ambiente de apertura comercial. Según el informe, el 90% cuenta con un promedio de parcela de tres hectáreas, donde logran una productividad de una tonelada métrica por hectárea, muy por debajo del 1.81 tonelada métrica por hectárea que logra el gran productor en la zona.
"La decisión de los productores de San Juan de invertir en estos cultivos se debe en parte a la existencia de un importante nivel de protección comercial y la canalización de subsidios vía precio", dice el informe.
Un estudio del economista Pavel Isa Contreras, realizado en 2006, revela que la diferencia de precios de los bienes producidos en San Juan, con respecto al de los mismos bienes producidos en Centroamérica, es simplemente exorbitante.
El arroz y la habichuela sanjuanera son 35% y 60% más caros, respectivamente, que los centroamericanos.
Esto significa que una vez llegue al país, libre de arancel, el arroz y la habichuela centroamericanos, desaparecerá del mercado el arroz y la habichuela sanjuaneros, seguidos por los productores del Granero del Sur.
La lista de precariedades también incluye la falta de crédito.
La agricultura de San Juan apenas recibió el 13% del crédito destinado esa provincia durante 2012 y 2013. Y cuando llegó, lo hizo a un plazo menor de un año (el 22.6% del crédito), o entre 1 a 3 años (20.8%), o entre 3 a 5 años (32%).
Los problemas son agravados por el hecho de que sólo el 15% de los productores tiene título de propiedad de su parcela, y que el 53% de los caminos vecinales "están mal, o en muy mal estado", dice el BID.
La reconversión.
En enero de 2013, el ministro de Agricultura, Luis Ramón Rodríguez, anunció un proyecto de reconversión productiva en el Valle de San Juan, con una inversión de RD$13.9 mil millones.
Ese proyecto incluía la construcción de 525,200 metros cuadrados de invernaderos, para lo cual ese ministerio convocó el 8 de julio de 2013 una licitación pública nacional para la compra, llave en mano, de esas instalaciones, a pesar de que a principios de 2013 sometió una solicitud de financiamiento por US$236 millones al BID para la reconversión agrícola del Valle de San Juan.
Pero el 9 de diciembre de 2013, el Comité de Compras y Contrataciones de ese ministerio declaró desierta esa licitación para evitar que "colisionen" el proyecto de Agricultura y el que evaluaba el BID.
Sin embargo, el 4 de diciembre el BID aprobó el proyecto de "Desarrollo Productivo y Competitividad de la Provincia San Juan", por un monto de sólo US$35 millones. Los documentos sobre este proyecto están publicados en la página del BID en Internet.
Las condiciones del préstamo es a 18 años y medio, con un período de 12 años de gracia y una tasa de interés basada en la Libor. Como contrapartida, el Gobierno dominicano pondrá US$3.3 millones.
Pero aún falta dinero para la reconversión del Valle de San Juan, y el reloj sigue corriendo hacia la apertura comercial.
"Los sanjuaneros saben de eso"
El presidente ejecutivo de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Osmar Benítez , afirma: "La transformación es para coger lo que tenemos en San Juan, y hacerlo mucho más productivo.
Un ejemplo es con la habichuela de San Juan, que se produce tres quintales y ver si la llevamos a diez quintales".
Argumentó: "Parte de los tomates y ajíes que se producen en San Juan se han servido en la Casa Blanca, entonces quiere decir que los sanjuaneros saben de eso".
