Sin embargo, el mismo ente consideró que el campo nubloso que se enseñorea sobre el Atlántico y tiene potencial para devenir ciclón, no afectará el país. Las lluvias, que comenzaron a principios de semana, cobraron dos víctimas fatales cuando una mujer trató de cruzar un río crecido en la provincia San Cristóbal y fue arrastrada por las aguas; su hermano, que trató de salvarla, está desaparecido.
Asimismo el COE dio cuenta de la inundación de cultivos de arroz y de terrenos sembrados de pasto a consecuencia de las aguas, que vinieron como una bendición a solventar una sequía de casi un año y se han tornado maldición.
Varias casas han sido afectadas por ríos desbordados y el COE ha enfrentado dificultades a la hora de evacuar a pobladores que temen la pérdida de sus bienes a manos de saqueadores, dijo un portavoz.
Los pronósticos indican que las lluvias persistirán hasta el fin de semana en casi todo el territorio nacional, lo que explica que el ente administrador de catástrofes mantenga la alerta roja en dos provincias del Norte, María Trinidad Sánchez y Duarte, y una del Este, Monte Plata.
A emergencia amarilla están sujetas Santo Domingo, Monseñor Nouel, Samaná, Sánchez Ramírez y San Cristóbal (en especial Villa Altagracia y los poblados ubicados en la cuenca baja del río Nizao y otras provincias.
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