Al hombre que le había dejado al volante, también en estado de ebriedad en el momento de los hechos, se le ha suspendido el carné de conducir durante cinco meses.
Los dos hombres habían sido detenidos por la gendarmería francesa en la región de Meurthe-et-Moselle, en una carretera comarcal poco frecuentada, el 25 de julio hacia las 3 de la madrugada, alertada por los zigzags de un coche que circulaba muy lentamente.
Ante el estupor de los gendarmes, el conductor les anunció que era ciego. El alcoholímetro había dado positivo en los dos hombres. "Era algo que quería hacer desde hacía tiempo, se lo dije (al compañero) y él cedió. No intento excusarme", se justificó el conductor, que ejerce de periodista sobre su condición de ciego.