En el Presupuesto General del Estado para este año se incluyó una partida de 3, 300 millones de pesos para cumplir con la promesa del alza salarial, como parte de las inversiones que hará el Gobierno en su programa de seguridad ciudadana.
El aumento salarial era una necesidad sentida, tanto así que desesperados por los bajos ingresos se produjeron casos en que agentes policiales denunciaron públicamente por las redes sociales esa situación de precariedad.
Estas denuncias se repitieron, proyectando una situación de malestar general que ameritaba de rápida y concreta respuesta del Gobierno, como finalmente ha acontecido.
Siempre se ha dicho que en la medida en que persisten los salarios insuficientes, que predomine una gran masa de agentes policiales con ingresos subsumidos por la inflación, estos se tornan más vulnerables para recibir sobornos, para meterse a delincuentes que atracan, roban o se prestan para el sicariato, el tráfico de drogas y otras formas de delinquir.
Como medida complementaria a la de los salarios es preciso hacer efectiva la prestación de servicios y garantías de servicios de salud y de seguridad social a los policías y el fortalecimiento de las condiciones operativas y logísticas en las que se fundamenta el trabajo de velar por la vida y los bienes de los ciudadanos. Listín diario digital. 28/01/2017.
