Por Rubén Moreta/25/12/2016
La honorable Alcaldesa Hanói Yaquelín Sánchez Paniagua convocó un encuentro con un reducido grupo de comunicadores sanjuaneros para hablar y dar explicaciones de la Plaza Comercial y Cultural que ella ha mantenido cerrada durante tres años.
En la actividad la mandataria municipal lanzó un coctel de andróminas y galimatías sin precisar cuándo, al fin, pondrá en funcionamiento dicho establecimiento, llamado a generar más de trescientos empleos directos y quizás igual cantidad de indirectos.
Una persona chusca me comentó, refiriéndose al oscilante manejo comunicacional de la prestigiosa funcionaria, que “la operación de Hanói fue un éxito….pero el paciente se murió”. Y es así. La doña habló y habló, pero la plaza comercial seguirá cerrada, reducida a una madriguera de ratones e insectos.
La obra se inauguró fastuosamente el 15 de diciembre del año 2013 a un costo de 525 millones de pesos, y no hay excusa que justifique el mantenerla cerrada, después de transcurridos tres años y dos semanas. Un error inexcusable, evidencia de ineptitud gerencial.
El municipio está cansado de los enredos discursivos de Doña Hanói Sánchez.
La verdad, la pura verdad es que la mandante local quiso hacer –y ha hecho- lo que le dio la gana con la obra: . repartírsela entre los suyos, 2. cambiarle el diseño, 3. reducir el tamaño de los locales para satisfacer politiqueramente una mayor clientela y finalmente, lo peor, 4. opacar la principal obra levantada por el Presidente Danilo Medina en San Juan de la Maguana.
El autor es Periodista.
