No nos cuidamos

El dominicano es tan buena gente, o está tan acostumbrado, que no se atreve a reclamar aunque sea a costa de su propia vida. Menos gente ha muerto por reclamar que las que han fallecido por no exigir sus derechos. 

Es el caso de los pasajeros que permiten que los chóferes de concho, guaguas casi los maten conduciendo temerariamente por nuestras calles y carretera, o el más reciente de los turistas que se montan en un bote sin chalecos salvavidas y con un capitán irresponsable que desoye las advertencias de mal tiempo. 

>Del mismo modo, no leemos las etiquetas de los productos que compramos, pues nos basta con la tentación del baratillo. Ni reclamamos cuando la calidad de un producto o servicio falta a los estándares del mismo. 

No es verdad que el Gobierno o las autoridades nos pueden proteger si nosotros mismos no nos protegemos. No hay mejor guardián de la propia seguridad que uno mismo. Nada de lo que pasa en el país, de los apagones hasta el desorden, fuera posible si reclamáramos nuestros derechos.Diario libre digital. 04/08/2016.