Por: Geury Sanchez/La Voz Tubanera
bohechiodigital@gmail.com--26/12/13----Hace un año exactamente que Padre Las Casas, despertó con una navidad trágica, un joven murió asesinado, la madrugada del pasado 25 de diciembre de 2013, se despierta con la tristeza de otra muerte violenta.
Jorge Antonio de los Santos Rodríguez (Pegote), fue asesinado en circunstancias aún no esclarecidas.
Las heridas fueron de arma blanca, una estocada en el cuello, cerca de la garganta y otra en la zona de la ingle.
El suceso se produjo en una barra de la calle conocida como la 42, a eso de la 1:30 am, la mayoría de los vecinos dicen no haberse dado cuenta. Los vecinos guardan silencio, solo algunos dicen unas pocas cosas.
El joven de unos 30 años era hijo de la señora Arcadia Rodríguez (Cadín), y residía en la calle Padre Billini, en la esquina caliente del barrio Santa Ana.
Del matador solo se tienen datos de rumores, pues testigos dicen que se trata de un tal Fello o El Peje, el cual labora como carretillero en el Ayuntamiento.
A la hora de escribir esta nota el cuerpo sin vida de Pegote yace en la morgue del Hospital Local, y la Policía hace ingentes esfuerzos por atrapar al homicida.
SE ENTREGA MATADOR
Se entregó anoche en el cuartel policial el nombrado Amalio Sánchez (en la foto), de 67 años, quien confesó haber asesinado a Jorge Antonio de los Santos Rodríguez la madrugada del 25 de diciembre.
El homicida dijo que el hoy occiso acostumbraba a “relajarlo”, y que la noche en cuestión, luego de burlas y manoteos “no aguantó” y le propinó las heridas que le causaron la muerte, utilizando un cuchillo, el cual le fue ocupado al momento de entregarse.
Dijo que se pasó todo el día escondido esperando la noche, pues desde el momento del hecho se percató de que familiares del occiso lo buscaban, y que prefirió ocultarse por miedo.
El señor es un anciano de 67 años, asmático, y con cierta discapacidad motora, y muchos se preguntan cómo fue capaz de propinar heridas tan certeras (cuello e ingle), para ocasionar una muerte.
De inmediato fue trasladado a Azua por la unidad de investigaciones criminales, donde será sometido a la justicia.
Las informaciones fueron suministradas a este reportero por el mayor Ángel María Ramírez Espinosa, comandante policial de Padre Las Casas.
