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SANTO DOMINGO.- Son de colombianos, venezolanos, nicaragüenses y un dominicano los siete cadáveres hallados este martes en una lujosa residencia Ojo de Agua, de Paya, en la provincia Peravia, confirmó la Policía.
El dominicano muerto es conocido como "Manolo", según informaron el fiscal adjunto Miguel Cuevas y el jefe regional de la Policía Nacional, coronel Hilario González.
Cuatro de los siete hombres encontrados muertos la mañana de este martes con impacto de balas y atados de las manos en un cañaveral, habían sido secuestrados la noche del lunes en una residencia de la referida provincia.
Una octava persona, Yoly Contreras Gómez, de nacionalidad nicaraguense quien resultó balaceado en el abdómen está internada en el hospital Darío Contreras. Lugareños de Ojo de Agua, manifestaron en la tarde que Contreras se hizo el muerto y luego salió a la carretera donde fue asistido y llevado al hospital Nuestra Señora del Regla.
La institución del orden dice que entre los muertos ha sido identificado el colombiano Jesús de David del Río Hans, de 28 años de edad, quien presenta impactos de bala.
Se informó que el personal de Patología Forense y de la Policía Científica, levantaron las huellas dactilares de los demás cadáveres en busca de determinar sus identidades.
Un equipo de oficiales, dirigidos por el general de brigada Rafael Bencosme Candelier, inició las pesquisas para establecer las circunstancias en que se produjo la ejecución de los extranjeros, encontrados sus cadáveres alrededor de las 10:00 de la mañana de hoy. Los investigadores recolectaron tres casquillos en la escena del crimen.
La Policía explicó que, según versiones del haitiano Emilio Basilio Victoria (Américo), quien se desempeña como sereno de la residencia, donde residían cuatro de los muertos, sus agresores se presentaron al lugar a las 10:00 de la noche vestidos con ropa de camuflaje y portando armas largas en una jeepeta negra, y tras golpearlo se llevaron a los hoy occisos.
Victoria narró, además, que uno de los residentes a quien solo conoce por "El Señor" le dijo "ábrale que ellos vienen para acá", pero que tan pronto abrió la puerta le dieron un culatazo en el estomago que cayó al suelo, penetraron a la residencia, obligando a las cuatro personas a tirarse al piso los encañonaron y los amarraron.
El dominicano muerto es conocido como "Manolo", según informaron el fiscal adjunto Miguel Cuevas y el jefe regional de la Policía Nacional, coronel Hilario González.
Cuatro de los siete hombres encontrados muertos la mañana de este martes con impacto de balas y atados de las manos en un cañaveral, habían sido secuestrados la noche del lunes en una residencia de la referida provincia.
Una octava persona, Yoly Contreras Gómez, de nacionalidad nicaraguense quien resultó balaceado en el abdómen está internada en el hospital Darío Contreras. Lugareños de Ojo de Agua, manifestaron en la tarde que Contreras se hizo el muerto y luego salió a la carretera donde fue asistido y llevado al hospital Nuestra Señora del Regla.
La institución del orden dice que entre los muertos ha sido identificado el colombiano Jesús de David del Río Hans, de 28 años de edad, quien presenta impactos de bala.
Se informó que el personal de Patología Forense y de la Policía Científica, levantaron las huellas dactilares de los demás cadáveres en busca de determinar sus identidades.
Un equipo de oficiales, dirigidos por el general de brigada Rafael Bencosme Candelier, inició las pesquisas para establecer las circunstancias en que se produjo la ejecución de los extranjeros, encontrados sus cadáveres alrededor de las 10:00 de la mañana de hoy. Los investigadores recolectaron tres casquillos en la escena del crimen.
La Policía explicó que, según versiones del haitiano Emilio Basilio Victoria (Américo), quien se desempeña como sereno de la residencia, donde residían cuatro de los muertos, sus agresores se presentaron al lugar a las 10:00 de la noche vestidos con ropa de camuflaje y portando armas largas en una jeepeta negra, y tras golpearlo se llevaron a los hoy occisos.
Victoria narró, además, que uno de los residentes a quien solo conoce por "El Señor" le dijo "ábrale que ellos vienen para acá", pero que tan pronto abrió la puerta le dieron un culatazo en el estomago que cayó al suelo, penetraron a la residencia, obligando a las cuatro personas a tirarse al piso los encañonaron y los amarraron.
